Investigadores descubren cómo las plantas son capaces de olvidar



Un equipo de investigación internacional ha descubierto la respuesta a una pregunta que se ha planteado desde hace décadas: ¿cómo olvidan las plantas? Al igual que los humanos, las plantas también tienen recuerdos, aunque lo hacen de manera diferente.


Por ejemplo, muchas plantas perciben y recuerdan el frío prolongado durante el invierno para asegurarse de que florezcan en primavera. Esta “memoria epigenética” se produce al modificar proteínas especializadas llamadas histonas, que son importantes para empacar e indexar el ADN en la célula. Pero lo que siempre ha sido una incógnita es cómo las plantas podían olvidar cosas.

Una de esas modificaciones de histonas llamada H3K27me3 marca los genes que están desactivados. En el caso de la floración, las condiciones de frío hacen que H3K27me3 se acumule en los genes que controlan la floración. Trabajos anteriores habían demostrado cómo H3K27me3 se transmite fielmente de célula a célula para que en primavera, las plantas recuerden que el invierno ha terminado, lo que les permite florecer en el momento adecuado.

Una vez que han florecido y producido semillas, las semillas deben olvidar este “recuerdo” del frío para que no florezcan demasiado pronto cuando vuelva el invierno. Dado que H3K27me3 se copia fielmente de una célula a otra, ¿cómo hacen las plantas para olvidar esta memoria en las semillas?

El equipo de investigación dirigido por Michael Borg en el laboratorio de Frédéric Berger en el Instituto Gregor Mendel de Biología Molecular de Plantas (GMI) de la Academia de Ciencias de Austria, analizó las histonas en el polen, con la hipótesis de que el proceso de olvido probablemente ocurra en el esperma incrustado. Los investigadores se sorprendieron al descubrir que H3K27me3 desapareció por completo en los espermatozoides.

También descubrieron que los espermatozoides acumulan una histona especial incapaz de transportar H3K27me3. Esto garantiza que la modificación se borre de cientos de genes, no solo de los que impiden la floración, sino también de los que controlan una gran variedad de funciones importantes en las semillas, que se producen una vez que el polen transporta el esperma para fusionarse con el óvulo de la planta. Este fenómeno se denomina “reinicio epigenético” y se parece más a borrar y formatear datos en un disco duro.