Descifrando cómo algunas plantas sobreviven sin nitrógeno: una vía genética para reducir los fertilizantes del futuro

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Un avance científico que abre oportunidades para una agricultura más sostenible


Redacción Mundo Agropecuario BET

La agricultura moderna se sostiene en gran medida gracias al uso masivo de fertilizantes nitrogenados. Trigo, maíz, arroz y otros cultivos fundamentales para la seguridad alimentaria dependen de una disponibilidad suficiente de nitrógeno, el nutriente que impulsa el crecimiento vegetal y la síntesis de proteínas. Sin embargo, el costo ambiental y energético de producir estos fertilizantes es cada vez más evidente. En este contexto, un nuevo avance científico ofrece un rayo de esperanza: investigadores han dado un paso importante para entender cómo ciertas plantas sobreviven con muy poco o, incluso, sin nitrógeno disponible, una habilidad que podría transformar la agricultura global.

Una investigación que promete cambiar el modelo actual de fertilización

Los científicos han centrado su atención en un grupo particular de plantas que prosperan en suelos extremadamente pobres. Estas especies poseen mecanismos genéticos y fisiológicos que les permiten resistir condiciones donde otros cultivos morirían rápidamente. El estudio, presentado recientemente, revela claves moleculares que podrían explicar cómo logran adaptarse a ambientes con carencia severa de nitrógeno.

Este descubrimiento es especialmente relevante porque, como señala la evidencia científica, comprender ese proceso podría conducir al desarrollo de cultivos más eficientes. La posibilidad de transferir o activar rutas genéticas similares en plantas de importancia agrícola abriría la puerta a variedades que necesiten menos fertilizantes, un objetivo que coincide con los esfuerzos globales por reducir emisiones, costos de producción y contaminación por nitratos.

El papel del nitrógeno en la vida vegetal y por qué su reducción es tan difícil

El nitrógeno es uno de los nutrientes esenciales para las plantas. Sin él, la síntesis de clorofila, aminoácidos, enzimas y otras moléculas vitales se detiene. Por esa razón, la mayoría de los cultivos presentan síntomas inmediatos de deficiencia cuando este nutriente escasea: hojas amarillentas, crecimiento limitado y baja productividad.

Las plantas que sobreviven sin nitrógeno disponible han sido un enigma durante décadas. ¿Cómo logran mantener sus funciones básicas? ¿Qué rutas bioquímicas alternativas utilizan? Las respuestas empiezan a tomar forma con este nuevo descubrimiento, que apunta a mecanismos de regulación genética capaces de activar modos de supervivencia altamente eficientes.

El hallazgo clave: cómo las plantas reorganizan su metabolismo

El avance científico sugiere que estas especies son capaces de reconfigurar profundamente su metabolismo para afrontar la ausencia de nitrógeno. En condiciones normales, las plantas destinan buena parte de su energía a procesos dependientes de este nutriente. Sin embargo, las especies estudiadas activan un conjunto de genes que remodelan sus rutas bioquímicas, preservando recursos que, de otro modo, se utilizarían de manera ineficiente.

Aunque la investigación está en una fase inicial, los científicos han identificado regiones genéticas y posibles proteínas reguladoras involucradas en esta adaptación extrema. Esto podría convertirse en una base para diseñar cultivos capaces de soportar suelos pobres sin sacrificar productividad, un avance que sería especialmente relevante en regiones donde los fertilizantes son costosos o difíciles de obtener.

Implicaciones para cultivos como trigo, maíz y arroz

Los cultivos más importantes del planeta son notoriamente exigentes en nitrógeno. Trigo, maíz y arroz consumen grandes cantidades de este nutriente por hectárea, lo que implica costos elevados para los agricultores y un impacto ambiental considerable. La posibilidad de introducir características genéticas que reduzcan esta dependencia podría transformar radicalmente la agricultura industrial.

Imaginemos variedades de arroz capaces de mantener su rendimiento con la mitad del fertilizante actual, o maíces que activen mecanismos de supervivencia similares a los de las plantas estudiadas cuando el nitrógeno es escaso. Esto representaría un ahorro significativo para los agricultores, especialmente en países de ingresos medios y bajos, y una reducción sustancial del exceso de nitrógeno en los ecosistemas.

Hacia una agricultura menos dependiente de insumos artificiales

La fertilización nitrogenada es responsable de una parte importante de las emisiones globales de gases de efecto invernadero, especialmente en forma de óxido nitroso, uno de los gases con mayor potencial de calentamiento. Al mismo tiempo, los excedentes de nitratos que llegan a ríos, lagos y mares alimentan fenómenos como la eutrofización, que afecta gravemente a la biodiversidad acuática.

Por ello, las rutas genéticas que permiten a ciertas plantas sobrevivir sin nitrógeno podrían convertirse en un eje central de la biotecnología agrícola del futuro. Al buscar maneras de activar esas rutas en cultivos comerciales mediante edición genética, selección asistida o biología sintética, los científicos trabajan hacia un modelo más eficiente, resiliente y sostenible.

Un desafío científico con grandes oportunidades

Aunque el descubrimiento es prometedor, todavía existen preguntas abiertas. Se necesita identificar con precisión todos los genes involucrados, comprender cómo interactúan entre sí y determinar bajo qué condiciones podrían transferirse o replicarse en cultivos agrícolas. Además, será necesario evaluar cuidadosamente los efectos de estas modificaciones en la productividad, la calidad nutricional y la adaptación a distintos ecosistemas.

Sin embargo, la dirección es clara: la agricultura del futuro será menos dependiente de insumos externos y más apoyada en la ingeniería genética, la investigación en microbiomas y la comprensión profunda del metabolismo vegetal. Este avance científico aporta un componente esencial para ese cambio estructural.


Referencias

https://phys.org/news/2025-11-genetic-nitrogen-bacteria.html