Investigadores de la Universidad de Copenhague (Dinamarca) han descubierto que las plantas pueden cambiar la dirección de sus raíces y crecer lejos de las áreas salinas.
Este descubrimiento cambia la comprensión actual de cómo las plantas cambian su forma y dirección de crecimiento y puede ayudar a aliviar el problema global acelerado de la alta salinidad del suelo.
El profesor Staffan Persson del Departamento de Ciencias Vegetales y Ambientales de la Universidad de Copenhague dijo que el mundo necesita cultivos que puedan soportar mejor la sal. Añadió que las plantas pueden hacer que sus raíces crezcan lejos de las áreas salinas, pero que no estaba claro cómo funciona este mecanismo. Con colegas de investigación, Persson descubrió exactamente lo que sucede dentro de las plantas a nivel celular y molecular a medida que sus raíces crecen lejos de la sal. Descubrieron que cuando una planta detecta concentraciones locales de sal, la hormona del estrés ácido abscísico (ABA) se activa, poniendo en marcha un mecanismo de respuesta.
Persson explica que las plantas tienen una hormona del estrés provocada por la sal. Esta hormona provoca una reorganización de los pequeños tubos a base de proteínas en la célula, llamados citoesqueleto. Luego, la reorganización hace que las fibras de celulosa que rodean las células de la raíz hagan una reorganización similar, lo que obliga a la raíz a torcerse de tal manera que crece alejándose de la sal. Los investigadores mutaron un solo aminoácido en una proteína que impulsa la torsión de la raíz, invirtiendo la torsión para que la planta no pudiera crecer lejos de la sal.
FUENTE: Universidad de Copenhague.