Este robot transforma desiertos en zonas verdes y funciona sólo con energía solar


Funciona de forma autónoma gracias al uso de energía solar y se desplaza a través del desierto plantando semillas


Mazyar Etehadi, estudiante del Instituto de Diseño de Dubai, presentó como proyecto final de grado un robot autónomo que planta semillas de forma manual en el desierto.

A’seedbot, así se llama este pequeño invento que guarda un gran parecido con el protagonista de Disney, Wall-E. Se trata de un robot que se desplaza durante el día por sí solo a lo largo del desierto, para absorber la luz solar a través de los paneles fotovoltaicos que tiene instalados en la parte superior.

Ecoinventos.com
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La función de este artilugio es poder cultivar la tierra estéril al plantar semillas y convertir, de esta manera, terrenos arenosos inhabitables en zonas verdes llenas de vida.

El robot se pone en marcha cada mañana gracias a sus pies con forma de hélice, que le permiten arrastrarse entre la arena, y va recogiendo la energía solar. Después, durante la noche, realiza su recorrido de nuevo, en el cual estudia el terreno, identifica las zonas fértiles, informa sobre ellas y finalmente planta sus semillas.

Pero veamos realmente cómo funciona A’seedbot: Su forma está diseñada de acuerdo con el concepto de “la forma sigue la función”. Se basa en una estructura dividida en tres partes principales, que desempeñan las funciones de ver, navegar y plantar respectivamente.

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La parte delantera consta de una cabeza móvil que permite al robot mirar a su alrededor para elegir el camino correcto, y gracias a los dos sensores que posee de ultrasonidos es capaz de evaluar el terreno mientras avanza.

En la parte central de la estructura están situadas la patas en forma de hélice que se desplazan a través de la arena con facilidad. En el interior del cuerpo está instalada la unidad de procesamiento, que se encarga de almacenar la información y decidir dónde se debe cultivar. También memoriza los lugares donde A’seedbot ha colocado las semillas para supervisar su crecimiento cada pocos días.

La parte trasera del cuerpo se arrastra por el suelo y es la encargada de ir expulsando los granos de cultivo cuando sea necesario.

Los paneles solares recubren la parte superior de la estructura, y no solo recogen la luz que se almacena en la batería y permite funcionar al robot, sino que también le ayudan a percibir la intensidad del sol para saber qué áreas son más convenientes para el crecimiento de plantas.