Científicos del Laboratorio Cold Spring Harbor (Nueva York, Estados Unidos), dirigido por el profesor David Jackson, han encontrado un gen que podría ayudar a aumentar la productividad de las plantas de maíz al aumentar la producción de granos en las las mazorcas.
Los científicos afirman que se puede aumentar la productividad de la planta redirigiendo los recursos que mantienen activo el sistema inmunitario, permitiendo una producción mejorada de semillas.
En la naturaleza, las plantas están constantemente en guardia y mantienen activo un sistema inmune para contrarrestar cualquier ataque. Esta vigilancia tiene un costo, ya que la energía gastada en la defensa del patógeno no puede usarse para el crecimiento de la planta o o producir más semillas. Sin embargo, esto es diferente para las plantas de cultivo, ya que el maíz que crece en el campo de un agricultor se enfrenta a menos amenazas. En este ambiente controlado, las plantas probablemente podrían disminuir sus protecciones antipatógenas para destinar esa energía en ser más productivas, pero lograr que esto requiere algunos ajustes genéticos.
En la investigación, los científicos identificaron un gen en el maíz que contribuye tanto al desarrollo de la planta como al control de su sistema inmune. Manipular este gen, dicen, podría ser una forma de aumentar el rendimiento de los cultivos reprogramando cómo una planta equilibra sus inversiones en crecimiento y defensa. Las plantas de maíz no pueden sobrevivir sin el gen, llamado Gß (pronunciado GEE beta), ya que codifica parte de un complejo de señalización esencial.
Las plántulas diseñadas para carecer de Gß rápidamente se vuelven marrones y mueren porque la planta necesita el gen para mantener su sistema inmune bajo control. Sin ella, un sistema inmunitario hiperactivo ataca las propias células de la planta. En sus experimentos, el equipo descubrió que las plantas pueden crecer sin Gß. También descubrieron que Gß también afecta el tamaño de los meristemos de una planta. Además, el equipo relacionó las variaciones naturales en el gen Gß con la producción de mazorcas de maíz con granos inusualmente abundantes.
Más información sobre la investigación en este artículo.

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