Descubren las bases moleculares de la detección de olores en plantas


Aunque parezca increíble las plantas también pueden oler. Investigadores japoneses han descubierto que esta capacidad está en sus genes y han descubierto los primeros pasos de cómo la información de las moléculas de olor puede cambiar la expresión génica en las plantas. 


El descubrimiento lo han realizado investigadores de la Universidad de Tokio liderados por Kazushige Touhara, convirtiéndose en el primer equipo capaz de revelar las bases moleculares de la detección de olores en plantas. Utilizaron plántulas de tabaco para estudiar cómo huelen las plantas, un organismo modelo común en los laboratorios de investigación.

Las plantas detectan moléculas de olor conocidas como compuestos orgánicos volátiles, que son esenciales para las estrategias de supervivencia, como atraer aves y abejas, disuadir a las plagas y reaccionar a enfermedades en plantas cercanas. Estos compuestos también dan aromas distintivos.  Los investigadores expusieron células de tabaco y plantas de tabaco de 4 semanas de edad a diferentes compuestos orgánicos volátiles. Descubrieron que las moléculas de olor cambiaban la expresión génica al unirse a otras moléculas llamadas co-represores transcripcionales que pueden activar o desactivar los genes.

En las plantas, las moléculas de olor deben moverse hacia la célula y acumularse antes de que afecten el comportamiento de la planta. En los animales, las moléculas de olor son reconocidas por receptores en el exterior de las células en la nariz e inmediatamente activan una vía de señalización para reconocer el olor y cambiar el comportamiento.

Las plantas no pueden huir, por lo que reaccionan a los olores más lentamente que los animales. Si las plantas pueden prepararse para el cambio ambiental en el mismo día, probablemente sea lo suficientemente rápido para ellas”, explica Touhara.  “Los humanos tienen alrededor de 400 receptores de olor. Los elefantes tienen aproximadamente 2.000, el mayor número en animales. Pero según la cantidad de genes de transcripción, las plantas pueden detectar muchos más olores que los animales”, afirmó.

Touhara espera aplicar sus descubrimientos para influir en la calidad o el carácter de los cultivos sin necesidad de recurrir a la edición genética o al uso de productos químicos. El científico espera que se llegue a conseguir inducir comportamientos deseados en plantas a través de la difusión de olores en los campos de cultivo. Por ejemplo, esparcir un olor capaz de cambiar el sabor de las hojas de la planta para disuadir a insectos depredadores .

La complejidad de la investigación ha hecho que haya durado 18 años. El proyecto comenzó en el año 2.000.“Todas las criaturas se comunican con el olor. Hasta ahora, nuestro laboratorio ha estudiado la comunicación dentro de las especies: insecto a insecto, ratón a ratón, humano a humano. Esta comprensión de cómo las plantas se comunican usando el olor abrirá oportunidades para estudiar la comunicación ‘olfativa’ entre todas las criaturas “, concluyó Touhara.

[FUENTE: Universidad de Tokio]