Esta es la opinión de un científico holandés que va a desarrollar medios fundamentalmente nuevos para proteger las plantas de las plagas de insectos.
De los llamados hongos zombis Ophiocordyceps , el público en general conoce bien la especie que infecta a las hormigas carpinteras ( Ophiocordyceps uniternalis ), Cordyceps, ya que es popular en las películas de terror, aunque no infecta a los humanos.
En relación a los insectos, ataque por hongos OphiocordycepsParece realmente aterrador en términos de la manipulación sobrenatural que el cuerpo hace de su anfitrión, provocando una serie de patrones de comportamiento completamente nuevos que recuerdan a los zombis. El ciclo de vida del hongo comienza como una espora pegajosa en el suelo del bosque. Si la espora se adhiere al cuerpo de la hormiga, crece hasta convertirse en hifas infecciosas (hilos en forma de hilo), destruyendo el exoesqueleto del insecto. Una vez dentro del cuerpo de la hormiga, el hongo crece y manipula el comportamiento del insecto, dirigiéndolo finalmente a un lugar cálido y húmedo en el suelo que servirá mejor para esparcir una nueva cosecha de esporas de hongos. Después de que la hormiga muere, el hongo termina de digerirla desde el interior y, como acto final, erige un tallo triunfal desde la base de la cabeza de su conquistador. El tallo libera esporas de unos característicos cojines laterales y el ciclo continúa.
Romy Jonkergau, candidata a doctorado en la Universidad de Utrecht, está investigando el desarrollo de insecticidas alternativos que no utilicen agroquímicos sintéticos agresivos.
En particular, se centró en el hongo zombi Ophiocordyceps y en el funcionamiento de determinadas proteínas (efectores) del hongo que actúan sobre determinados receptores de células de insectos (receptores acoplados a proteína G).
“Estas proteínas y sus receptores podrían convertirse en la base de nuevos insecticidas biodegradables y ecológicos. El trabajo científico combina nuevos métodos de análisis de proteínas con un área de la biología relativamente inexplorada: la interacción de hongos e insectos”, explicó el científico, sin revelar aún los detalles del nuevo estudio.
(Fuente: www.uu.nl.)