Condensador de aire produce agua potable


Este dispositivo, que se puede instalar en los hogares o llevarse como un generador de agua portátil, fue creado por un grupo de estudiantes de Ingeniería Electrónica de la Universidad Nacional de Colombia (U.N.) Sede Manizales.



A partir del punto de rocío, que es la más alta temperatura en la que empieza a condensarse el vapor de agua contenido en el aire, la máquina desarrollada llega al máximo de su funcionamiento gracias a unos tubos de cobre y una placa Peltier, la cual actúa como una bomba de calor de estado sólido, es decir que puede emplear energía para transferir altas temperaturas de un espacio frío a otro caliente.

Estos dos instrumentos utilizados en el prototipo permiten que se genere el agua al entrar en contacto con el aire. “Cuando tengo un aire muy caliente y unos tubos muy fríos es muy fácil que escurra el agua”, afirma Juan Esteban Villada, uno de los desarrolladores de esta iniciativa.

Gracias a la nivelación de la temperatura dentro del prototipo se obtiene agua constantemente, sin afectar el medioambiente.

“Al nivelar la temperatura del aire que recibe, el condensador puede, por la ventilación y la humedad de la temperatura, proveer constantemente el agua”, asegura el estudiante.

El prototipo –creado también por Daniela Aguirre, Santiago Narváez, Adrián González y Samuel Woodcock– tiene el propósito de medir la humedad del entorno a través de un sensor que deduce su valor, a partir de una molécula cristalina que tiene mucha afinidad con la absorción de agua.

El dispositivo instalado en la máquina aprovecha estos niveles de humedad a través de la ventilación y la temperatura, para realizar el proceso de producción de agua sin importar el estado del tiempo, es decir si hace frío o calor.

Campesinos o que personas viven en sectores rurales en los que el agua es escasa podrían usar el dispositivo, que se encuentra en fase de prototipado, y que sus desarrolladores planean perfeccionar como herramienta indispensable para el futuro.

El artefacto se puede dejar al aire libre, y mediante su tecnología este identifica el punto de rocío; después absorbe el aire que produce el agua, y según el tamaño del artefacto será la cantidad producida.

Inicialmente el prototipo puede llenar un vaso de agua en dos horas, pero los estudiantes están instalando nuevas placas que optimizarían el proyecto, lo que promete generar agua constantemente. 

Como está en fase de prototipado aún no se ha determinado un valor comercial para este dispositivo, por lo que los estudiantes continuarán en estudios para optimizarlo y llevarlo a zonas en las que no se tenga acceso al líquido.

Según el Informe Mundial sobre el Desarrollo de los Recursos Hídricos de las Naciones Unidas (ONU), el acceso al agua y al saneamiento es un derecho internacionalmente reconocido. Sin embargo, más de 2.000 millones de personas en el mundo no tienen acceso al vital líquido.

Con este conocimiento, los estudiantes piensan en las próximas generaciones y su relación con el agua, ante un escenario de cambio climático. A raíz de esta preocupación crearon el condensador capaz de producir el líquido aprovechando la humedad del entorno, como solución a la falta de agua que se pueda presentar en el futuro.