Científicos suizos están desarrollando una tecnología de imágenes tridimensionales (3D) rápida y segura para obtener evaluaciones confiables in vivo de la química del cuerpo y la canal del ganado vacuno en crecimiento.
Conocer la química corporal del ganado es clave para evaluar con precisión sus necesidades dietéticas y determinar el momento óptimo para el sacrificio. Una adaptación adecuada de la dieta puede mejorar la eficiencia alimentaria, contribuyendo así a mejorar la rentabilidad de las explotaciones, informa el instituto de investigación suizo Agroscope.
El método de referencia utilizado para cuantificar la composición química de una vaca requiere que ésta sea sacrificada para poder tomar muestras de tejido para análisis de laboratorio. Este es un método costoso y que requiere mucha mano de obra que resulta en la pérdida de cadáveres y despojos comestibles y solo puede usarse una vez durante la vida del animal. En consecuencia, está limitado a fines de investigación científica.
Otros métodos disponibles son la evaluación visual o palpatoria que conduce a la clasificación o evaluación de la conformación de la canal y el relleno de grasa. También se pueden utilizar tecnologías de imágenes como ultrasonido o rayos X. Sin embargo, estos últimos aún no se utilizan mucho debido a sus limitaciones (precisión, coste, medidas de seguridad).
En este contexto, el rápido desarrollo de la tecnología de imágenes 3D abre nuevas perspectivas. Este método no invasivo es seguro y fácil de usar ya que no requiere contacto directo con los animales. Las imágenes 3D ya se han utilizado con éxito en ganado lechero para medir ciertos rasgos morfológicos, pero su uso para la evaluación in vivo de la composición corporal y de la canal aún no se ha probado en ganado vacuno en crecimiento.
El propósito de este estudio fue calibrar y evaluar la precisión de las imágenes tridimensionales para determinar la química in vivo del cuerpo y la carcasa de toros en crecimiento cruzados (descendientes de madres Pardo Suizo cruzadas con toros Angus, Limousin o Simmental).
Se tomaron imágenes en 3D de 100 toros en Agroscope Posieux en 2020-2021, ya sea a medida que crecían (de 75 a 520 kg de peso vivo y de 34 a 306 kg de peso en canal) o con un peso fijo (517 kg de peso vivo y peso en canal de 289 kg). , correspondiente al peso habitual con el que se sacrifica en Suiza. Se obtuvieron medidas morfológicas lineales, circunferenciales, superficiales y volumétricas a partir de imágenes 3D de animales tomadas inmediatamente antes del sacrificio.
Estas mediciones tridimensionales se utilizaron como variables predictivas en ecuaciones que estimaban la masa y proporciones de agua, lípidos, proteínas, minerales y energía en el cuerpo y canal del ganado, que se midieron según un método de referencia post-mortem.
La técnica de imágenes 3D permitió una evaluación precisa de fenotipos de interés, como el peso vivo, el peso de la canal y el rendimiento, así como la química del cuerpo y la canal.
Cuando los rasgos morfológicos medidos in vivo mediante imágenes 3D se agregaron al peso vivo en ecuaciones predictivas, la precisión de las estimaciones de la composición corporal y de la canal mejoró sistemáticamente en relación con el peso vivo solo y fue comparable a la obtenida a partir del peso vivo y la clasificación de la canal mediante métodos convencionales.
Este estudio representa el primer paso en el desarrollo de imágenes 3D para el monitoreo in vivo no invasivo de la composición corporal y de la canal en ganado en crecimiento. Los resultados ahora deben ser confirmados y verificados mediante estudios adicionales. El uso en la granja o en el matadero también requiere un mayor desarrollo técnico. Cuando se pruebe e implemente en granjas como parte de un enfoque ganadero de precisión, la tecnología 3D proporcionará datos procesables para mejorar la eficiencia alimentaria y la rentabilidad de las granjas.
Fuente y foto: Agroscopio.